En este tiempo de crisis económica, la ONG Humana, filial española de la secta danesa Tvind según las denuncias de muchos expertos y afectados, ofrece ropa usada en sus tiendas.
En la prensa hemos podido leer recientemente declaraciones de algunos de sus empleados. Por ejemplo, en la ciudad de Granada, Charo Cortés Manzano, de 43 años, trabaja en las dependencias situadas en la Avenida Constitución de la ONG Humana. Se encarga de vender ropa y su objetivo es "conseguir fondos para ayudar a gente necesitada", según afirma. Lo leemos en Granada Hoy.
La ropa se obtiene de donaciones y "parte de ella, la que no sirve, se recicla, pues también hay interés por colaborar con el medio ambiente. El resto se vende a precios bajos a todo tipo de clientes", declaraba. Aseguraba que "no sólo viene gente necesitada, sino de todo tipo de clases sociales. A algunos les gusta la causa y a otros los bajos precios". Añade que "la gente puede comprar a buen precio y además realizar una buena acción con ello, por lo que atrae mucha clientela".
Contaba que "muchos clientes vienen buscando cosas que ya no pueden encontrar en otros sitios, ya que la mayoría de prendas son antiguas". A esto le sumaba que "tenemos una gran variedad y exclusividad, todo es diferente. Hay que recorrer toda la tienda para saber lo que tenemos". Charo se encuentra "muy agradecida a todas las personas que ayudan de corazón" y espera que todo vaya bien, ya que "si la tienda va mal, perjudica a mucha gente que lo necesita".
Según explica el diario, el rango de acción de la ONG Humana es muy amplio, pero se centra sobre todo en el sur de África. Además, colaboran siempre que se produce una catástrofe, ante lo que Charo afirmaba que "la gente suele ayudar en esos momentos, pero cuando pasa el temporal la necesidad sigue existiendo y se olvidan de ello". Para ayudar con la causa, basta con comprar ropa o, directamente, donarla en los contenedores habilitados para tal efecto. Llevan el logotipo de Humana para ser identificados y se ubican generalmente por los pueblos de la provincia, ya que en la capital realiza la misma acción la ONG Cáritas.
La verdad de unas cifras
José A. Navas en su artículo "Humana, los jirones de una ONG", publicado en El Mundo Dinero en el año 2004, señalaba que la actividad económica de Humana España es significativa y tiene una estructura prácticamente empresarial con unos 200 empleados -no trabaja con voluntarios- y unos sustanciosos beneficios. Humana obtiene al año unas ganancias de entre 800.000 y 900.000 euros, "que se dedican íntegramente a fines sociales" en palabras de Rafael Más, portavoz de la organización, y tenía entonces convenios de colaboración con cerca de 700 ayuntamientos en nuestro país, según datos ofrecidos en el citado artículo.
Se menciona asimismo que la organización factura alrededor de cinco millones de euros al año y posee unos 4.000 contenedores esparcidos por todo el territorio nacional en los que recogen 15.000 toneladas de ropa. Contrariamente a lo que se podría pensar, esa ropa no se dona. Un 60% se vende directamente a empresas (traperías), mientras que el 40% restante se clasifica en tres centrales que posee la organización. Tras la clasificación, de esas 6.000 toneladas, el 12% se vende en las 19 tiendas que Humana tiene en España (11 en Cataluña, siete en Madrid y una en Granada), mientras que entre el 10% y el 15% se desecha y el 30% se vende como material de reciclaje.
Entre el 35% y el 45% -unas 2.400 toneladas- se envía a países africanos, donde la ropa acabará también en tiendas para ser vendida a clientes o pequeños empresarios por muy bajos precios. Humana España afirma tajantemente que todo el beneficio generado por estas actividades se dedica a realizar proyectos de ayuda en países pobres, como Angola y Mozambique, donde desde 1993 se crean escuelas para formar profesores que fomenten la educación en zonas rurales. Otros programas estarían dedicados a la sanidad, la agricultura o la prevención del SIDA.
Fuente: Info-RIES nº 119 (17/02/09).
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